D Cuando rezamos, cuando cantamos, cuando la fiesta es A7 D E7 A7 un celebrar gozoso el día grande: Pentecostés; D cuando llevamos en nuestras manos un resplandor de luz, A7 D Bm /en nuestro pecho vive y palpita Em A7 D el que murió en la cruz./ G D Cuando el Señor alienta en nosotros, A7 D siempre es Pentecostés, G D cuando el amor nos lanza a la vida, A7 D siempre es Pentecostés. Cuando queremos comprometernos en una misma fe, una tarea, un compromiso... siempre es Pentecostés. Cuando decimos sí a la Iglesia con plena lucidez, / soplan de nuevo vientos del cielo porque es Pentecostés./ Cuando los hijos van creciendo y dicen que quieren ser miembros de Cristo y de la Iglesia... siempre es Pentecostés. No nos separan lenguas ni razas, nuestra consigna es /ser en el mundo un testimonio porque es Pentecostés./ Cuando la fuerza que estaba oculta vence con su poder nuestros temores, nuestro egoísmo... siempre es Pentecostés. Cuando aceptamos ser levadura y llama que quiere arder / nos vinculamos más a la Iglesia porque es Pentecostés./