A A(#5) A6 El fantasma caníbal y la niña encantada de Ciudad del Cabo A(#5) A A(#5) hicieron buenas migas, bajo el sol agobiante, del sol tropical A6 A(#5) A En un cruce de rutas trágico y fantástico, sobre el fin del mundo A(#5) A6 A(#5) A A(#5) A6 A(#5) se juraron hermanos, ante el África inmensa y la nada glacial A A(#5) A6 Así el fantasma enano que fue amurallado en vida real, A(#5) A soñó venganza eterna para toda la tierra A(#5) A6 A(#5) y hasta no lograrla jamás descansar A A(#5) A6 A(#5) Se cuenta que un día desangró a una niña en un matadero cerca del parral A A(#5) A6 A(#5) Desde donde ojeaba como aquella niña besaba a un mancebo de nombre Marcial A A(#5) A6 A(#5) Y así fue su marcha desde ese día en Ciudad del Cabo nada volvió a entrar A A(#5) A6 A(#5) Lo enterraron vivo, ladrillo a ladrillo La niña encantada dejo de temblar A A(#5) A6 A(#5) A y se fue despacio encantando a todos Los ojos abiertos llenos de bondad F#m A Y él comió cabezas de rana de monos, ojos de jirafa, padres del Brasil F#m A almas como ratas, flores y mandriles Yeguas con cabezas llenas de Clotil F#m A Devoró los ríos, todas las quebradas desde Purmamarca hasta Panamá F#m A Trituró los dientes, las extremidades los páncreas infectos y la soledad E A A(#5) A6 A(#5) por siempre jamás. A A(#5) A6 A(#5) Pasaron los años y el fantasma enano caníbal no tuvo ya nada que comer A A(#5) A6 A(#5) se encontró tan solo y tan desamparado que lloro un minuto, y no por compasión A A(#5) A6 A(#5) sino porque nunca nada es para siempre Mientras eructaba dulce tiburón A A(#5) A6 A(#5) Durmió nueve siglos y una madrugada despertó exaltado, lleno de emoción A A(#5) A6 A(#5) La niña encantada de Ciudad del Cabo le brindo su leche, le brindo ilusión A A(#5) Ella había esperado bajo un mastodonte A6 A(#5) besar al caníbal y hacerlo feliz A A(#5) A6 A(#5) Caminaron juntos ciudades vacías cerca de la orilla, lejanos al fin A A(#5) A6 A(#5) Entonces fue encantado por esa mirada a la que quito vida un día de abril A A(#5) A6 A(#5) A Y murió eternamente el fantasma caníbal oh oh oh oh La niña del Cabo A(#5) A6 A(#5) tuvo así que atarse en una buhardilla de un techo en París A A(#5) A6 Cuando el lobo aúlla su furia infinita se huele un aroma A(#5) A A(#5) perfecto y sutil es ella agita su turbia melena A6 A(#5) A sobre aquella enana venganza de abril.