D Al ver Jesús la gente que marchaba, A7 pues era duro su mensaje oír, G D en sus amigos puso la mirada, A7 D /diciéndoles: «También se quieren ir?»/ A7 D ¿A quién, Señor, iremos a por vida, A7 D a quién, Señor, iremos a por luz? A7 D tan sólo Tú palabras das de vida, A7 D tan sólo Tú palabras das de luz. Al ver Jesús al joven dar la espalda pues sus riquezas no quiso dejar, cambió el semblante y dijo: «Qué difícil /es a los ricos a mi Reino entrar»./ Al ver Jesús las gentes descarriadas, en su vagar de ovejas sin pastor: «Mi yugo es suave, mi carga liviana, /vengan a Mí» - les dijo con amor./