1000 Km
Patagonia Revelde

Cae de lleno la noche
el silencio es el dueño otra vez
La lluvia que lava, me moja
y no quita el barro de mis pies
Sobre el cuello de tu esperanza
estos ojos tiemblan de miedo
Hace más de una vida entera
esperan por nacer
1000 km pasé, sin tomar agua ni tener sed
el tiempo traía algo más, y ya no era nada igual
Esas sombras que hay ahí, son tan parecidas a mí
ay cielos, que lejos que estoy de la furia de ese sol
El tiempo marcaba los naipes
yo nunca sabía por que
el ancho de espadas se achica
y parece un peón de ajedrez
Los gritos que escucho en las noches
son tan parecidos a los míos
cortan el aire en pedazos
y no te dejan volar